He caminado más de mil kilómetros. Solo y acompañado. Con extraños, amigas, mis hijos y mi nieta. He subido a Cruz de Ferro con Susan y bajado a Rabanal del Camino con dos ángeles disfrazados de perros guardianes y he presentido la presencia de Gladys en camino al fin de la tierrra.

No he hecho más que caminar por senderos que millones en mil años han peregrinado. Un paso tras otro es lo que hecho y en ese simple humano caminar he construido, encontrado o descubierto una narrativa que le da sentido a ese largo caminar que es el existir.

He comprendido que la vida nos más que pixeles sin sentido pero que vistos en su totalidad adquieren sentido a quien tiene ojos para verlos, emoción para sentirlos y fe para creer que somos más que este momento.

Viktor Frankl dijo que la vida no tiene sentido y que uno le da sentido a ella. Yo discrepo, la vida tiene sentido y uno lo encuentra buscando las flechas que señalan el sendero.

Soy Peregrino